Síntomas

  • Debilidad muscular progresiva que inicia generalmente en la adolescencia y que produce:
  • Pérdida paulatina de capacidades como correr, brincar, saltar, realizar deportes, etc.
  • Pérdida paulatina de la capacidad para caminar: la capacidad para caminar puede continuar en la edad adulta hasta la tercera década
  • Caídas frecuentes
  • Problemas respiratorios
  • Disfunción cognitiva
  • Deformidades del tórax y espalda (escoliosis)
  • Contracturas de talones y piernas
  • Seudohipertrofia de los músculos de la pantorrilla
  • Fatiga
  • Enfermedad cardíaca